viernes, 22 de enero de 2010

"Cuando vivir es un lujo, okupar es un derecho"

Así reza un vieja pared de un bonito y céntrico barrio granadino. Y es que la solución a las ocupaciones no son los desalojos.
Quienes hoy salen por esa puerta entre desacreditaciones mediáticas volveran a derribar una ajada puerta de una abandonada casa, salvada de la ruina por sus nuevos moradores que la cuidarán, puede que no a la vieja usanza, pero viviran allí, con lo que dudo mucho que se entretengan a romperla.



Un nuevo desalojo solo lleva a una nueva ocupación, porque el problema no está en los ocupantes. En su mayoría estudiantes independientes o artesanos autosostenidos que no pueden acceder a una vivienda o en el mejor de los casos acceder sin vender su vida a una entidad financiera que los estrujará y arrebatara la mayor parte de su sudado salario, arrebatandoles la poca libertad que pueda quedarle en esta sociedad de la desinformación y la manipulación televisada. El problema no son esos "perroflautas".

El problema viene de que, como siempre, la clase "dominadora" que posee el capital se aprovecha de la que no lo tiene o lo consigue con cuentagotas, cuando las necesidades básicas fisico-morales de una persona son un negocio. El principal negocio de un "estado social y democrático de derecho". Dónde mietras muchas personas no pueden emanciparse, con lo que ello conlleva en el desarrollo de la persona, otras acumulan propiedades, arrendamientos, enriqueciendose cada vez más (y cuando alguien se enriquece al menos una persona se empobrece) al tiempo que nuestras ciudades, en especial sus barrios históricos, se llenan de viviendas vacías, abandonadas, condenadas a la ruina. Ruina que permitiría su demolición y edificación de algún bloque de pisos, donde caben más personas, donde se generan más ingresos.

La solución no pasa por sacar a esa clase media (si miramos de lejos) que reivindica un mejor reparto y hace lo que puede por ser una persona libre. La solución no pasa por decir unas ideas muy bonitas, principios rectores de la política social y económica, falsos derechos constitucionales que no pueden ser interpelados en base a la propia constitución porque solo son principios rectores, consejillos, en definitiva calla conciencias y calla bocas. ¡Mira que constitución mas bonita tenemos! Ah no, eso que pone ahí no lo hacemos, solo es un principio. Y todos tan felices, está claro que el legislador no tenía muchas ganas de acabar con las diferencias que obviamente le favorecian, sus salarios y pensiones les permiten el acceso no a una vivienda, si no a varias. Otros por el contrario no podr?a acceder más que a un arrendamiento o hipotecar su vida. ¿Quien gana? El propietario de los inmuebles o de la entidad financiera. ¿Últimamente se peleaban por ver que POLÍTICO iriá al frente de Caja Madrid? Que curioso

Dice el artículo 47 de nuestro querido texto constitucional, ese que nos convierte en una democracia moderna, propia de un país civilizado de primer mundo:

"Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación
La comunidad participará de las plusvalias que genere la acción urbanística de los entes públicos"

¿Cuantos ayuntamientos esan o han sido investigados por espeulación urbanística?, La mínima parte, al menos en los pueblos de mi entorno, donde se ve que son lo suficientemente discretos...

En fin, ya se que el artículo no dice que ese disfrute sea en propiedad, pero vamos lo veo lejos de la situación actual.
En mi modesta opinión si aplicasemos este artículo de verdad y aquel otro que decía que los valores superiores de nuestro orenamiento jurídico son la libertad, la justicia y la igualdad (Artículo 1 de la constitución) lo mismo los policias podrían dedicarse a detener choris en lugar de desalojar casas

¿Porque no dejar que un sintecho y un techo solitario alivien sus penas?


La solución no pasa por desalojar, está en el respeto.

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